Homofobia en pequeñas dosis

Nicaragua, aún en pañales en temas LGBT, como sociedad sí ha tenido cierto crecimiento en cuanto a su aceptación y tolerancia a la diversidad sexual. Las personas (principalmente la juventud) están siendo más abiertos al tema y  por ende cada vez más personas pertenecientes a la comunidad LGBT se atreven a asumir su identidad sexual públicamente (y no por ponerse una etiqueta o porque al mundo le competa, sino porque simplemente ocultarlo sería darle la razón al pensamiento generalizado que lo que se hace y siente está mal y debe permanecer oculto). Lastimosamente sí creo que nos falta muchísimo camino por correr como país en temas pesados como leyes inclusivas o educación, pero no se puede negar tampoco que hay un mal mucho más sutil pero también doloroso: la homofobia en pequeñas dosis. A veces las personas tienen pensamientos y creencias homofóbicas tan arraigadas  en la mente que pasan desapercibidas porque las vemos como algo normal o ligero.

He aquí algunos ejemplos:

Te acepto…pero ¡es que no parecés!

Estereotipar a los homosexuales es cosa ya de todos los días; este punto es el más común y el más obvio pero siempre es importante mencionarlo porque es algo que se sigue haciendo.  Se piensa que gay es sólo aquel hombre que es algo delicado en el hablar y caminar; le gusta la moda y sabe maquillarse “mejor que su mamá”. Por otro lado,  lesbianas son aquellas mujeres de pelo corto, que usan camisetas y no tienen un solo zapato de tacón alto en su armario.

¿Hay homosexuales con esas características? Claro ¿Todos los homosexuales las tienen? ¡No! Me pregunto, ¿Desde cuándo la homosexualidad es  una característica visible? Así como hay heterosexuales con diferentes maneras de vestir, diferentes gustos musicales, diferentes cortes de pelo, muchas maneras de actuar, diferentes valores, ¿Por qué los homosexuales tienen que ser todos iguales? Al fin y al cabo la preferencia sexual es solo una de las tantas características de un ser humano.

En este sentido, según ellos, las personas bisexuales tendrían que vestirse como el villano de Batman: Dos Caras.

Te acepto… con tal que me respetés

Aparentemente los gays y lesbianas le caen a todo, no tienen estándares ni dignidad; tienen la libido más fuerte que cualquier otro ser humano y cada día tienen deseos de una presa nueva. En serio,muchos hombres creen que solo por el simple hecho que tienen pene ya son una presa apetecible para un hombre homosexual; al igual que hay mujeres con tan gran autoestima que creen que por conocer a una lesbiana, ya son el amor platónico de esta. Este tipo de personas si te conocen, “te respetan” pero tienen que dejar claro que no están interesados.

Aunque cierto chiste dice que si sos la mejor amiga de una lesbiana y no le gustás, fallaste como persona y mejor amiga.

Te acepto pero no estoy preparado/a para tu ¨ambiente¨

Estos amigos jamás te acompañarían a una disco gay – o mejor dicho – al par que actualmente existen. La razón de no visitar ¨esos lugares de ambiente¨  no es porque la música sea mala, porque es caro o cualquier otra razón un poco más lógica a: “la gente podría pensar que yo también son gay”. Es una lástima porque se perdieron de lo una vez fue Lollypop, esas barras libres y tardeadas, son insuperables.

“Voy a dejar de ir a Broder, AltaBar o El Chamán porque como no se autodominan discos de ambiente, la gente va a pensar que soy heterosexual”

Te acepto pero uso la palabra gay como insulto/broma

Esto principalmente se da en hombres; hombres que juran que no son homofóbicos y respetan a los homosexuales pero ocupan la palabra gay como insulto.

Ejemplos: *No estés de gay *¡Dejá la ¨gayada¨! (aparentemente es una palabra) *¡Ayyy te la comés toda! *Ay,ya vas de maricón.

Y así cualquier tipo de comentario que lo que da a entender es que ser homosexual es un mal, y es motivo de vergüenza o burla. Después se preguntan porque a un hombre se le hace más difícil aceptar su identidad sexual, cuando en su colegio, universidad o trabajo escucha cochón aquí, y cochón allá.

Te acepto pero la verdad es que sí sos diferente

Este tipo de situaciones se da cuando otras personas le dan más importancia a la sexualidad que a cualquier otra cosa. Personas que en realidad no son muy cercanas a vos pero están a tu alrededor y terminan dándose cuenta y lo hacen chisme porque aparentemente la sexualidad de alguien es un gran tópico que tiene que ser de conocimiento general. Apenas se dan cuenta que alguien es gay, lo consideran tan importante que tienen que informárselo a todos los que también lo conocen.

También están los otros más cercanos presentan al “amigo gay”, no simplemente a su amigo, y sacan todo su repertorio de bromas homofóbicas con él o ella, porque es su prix y obvio no lo va a tomar a mal.

Te acepto pero no te creo

Estas personas no tienen problema que seas homosexual pero te viven aconsejando que tenés que probar el ¨bando correcto¨. Son los que te dicen que sos gay/lesbiana porque no has conocido a la persona correcta que te muestre de lo que te estás perdiendo, o de una manera más decente te dicen que les preocupa que simplemente es una confusión que no has sabido manejar. Los y las bisexuales confunden a este tipo de personas.

Esta pequeña lista sólo es una muestra de las ideas homofóbicas que muchas personas tienen, pero como no son tan graves como un insulto o ataque físico las personas no les prestan mucha atención y no deciden erradicarlos de su comportamiento,  porque simplemente están acostumbrados  y no se percatan del impacto negativo que pueden llegar a tener (o ya tienen).